Pese a ser un clásico en muchos armarios, no siempre encontramos al estampado de pata de gallo en la pasarela. Este año es una de las tendencias estrella y lo hemos podido ver de diferentes maneras, desde sus versiones más clásicas con Lanvin, Mulberry o Tommy Hilfiger, hasta con un toque más moderno como el diseño de Versace con ciertos aires futuristas. Sin embargo, yo estoy enamorada del vestido de Dior, un diseño que une el estampado de pata de gallo con el rosa palo tan de moda esta temporada.
A mí de pequeña era un estampado que me horrorizaba, pero con los años le he ido tomando especial cariño y esta temporada por fin me he atrevido a comprar algo, y qué mejor elección que las bermudas de Érase que se era, una firma afincada en Ourense que está comenzando y que tiene cosas preciosas. Las descubrí en el certamen Mara Martín Ponmonovo y me parece que tienen propuestas interesantes y diferentes, algo que a día de hoy es muy difícil de encontrar. Además, como os mostré en Instagram, su packaging es puro amor.
En cuanto al resto de marcas, tenemos un poco de todo, a mí personalmente me gusta más en partes de abajo o en abrigos, pero la chaqueta de Compañía Fantástica me encanta y requetencanta. Asos, Zara y Mango son los que más se adaptan y más estilismos nos proponen, y Massimo Dutti le da un toque muy british y clásico con los pantalones de vestir, perfectos para ir a trabajar.
2 Comments
Me encanta esta tendencia! es un print que me trae recuerdos de la infancia!! yo ya me he hecho con alguna prenda para este invierno! jejejeje
Yo me resistía pero ahora la veo una tendencia elegante y con muchas posibilidades 🙂